sábado, 13 de febrero de 2010

Depende

Llevar una semana de paso significa que no haces otra cosa que intentar que pasen los días, uno a uno, sin amontonarse pero sin dejar de pasar. Estar de paso no me gustó nunca pero a veces es necesario. Ahora que eso sí ha sido de paso pero de segundo a segundo. Todavía no puedo poner por escrito lo vivido el fin de semana pasado, es más, no quiero leerlo nunca. Aún así, esta semana me ha traído una excursión, una semiexcursión propia de zapatos viajeros pero en modo nacional y tamaño reducido; nos hemos ido con mis padres a la zona del Salnés, un valle en el sur de Galicia, llenito de parras de albariño, de bares con encanto, de pulpo á feira, de buen pescado, buenas tapas, mar, y mar, y mar, y más mar, encabritado y haciendo caballitos pero bien, bien, azul; y un frío... qué frío, es poco amigo de aparecer por aquí al por mayor pero con el sol radiante es como de regalo de boda, por ejemplo, o del mejor cumpleañista, o del buen sonreidor. Y luego la lonja de Cambados a eso de las seis de la tarde, en plena ebullición, con el pescado recién traído en los barcos amarrados en el mismo puerto, peces todavía moviéndose en las cajas donde se pesan, un olor, un color... parecen otros animales a los que a veces se ven en según qué sitios; y un pulpo de diez quilos y pico, y una centolla como de cuatro, y choquitos de la ría, grandes, menos grandes, pequeños, más chicos...
Mis sensaciones de la semana pasan por mil puertos de mar, río, montaña... por mente en blanco, incapaz de desarrollar la menor teoría si quiera la de cómo ir al súper; por horas que no acaban, por compinche a la espera en la puerta por si algún día vuelve, por pinchos en la barra de un bar con una agradable conversación, mejor compañía; por sabor a mar y olor a azul, los colores tienen olores en esta parte del mundo; recuperaciones, subidas, bajadas, sonrisas, intentos, cena con amigos, comidasss con padres... una semana más que no una buena, claro que ir de excursión, por suerte, la ha salvado y sí claro, esto se agradece. Es decir: depende.

3 comentarios:

antonio dijo...

Prueba superada, Coro.
Sólo te digo que me encantan leer tus entradas, Naturalidad, frescura, transparencia, cercanía es lo que encuentro en ellas. Buen domingo.

coro dijo...

Ay Antonio, cómo me animan tus palabras. Un abrazo y buen domingo también para ti.

Miriam dijo...

Poco a poco y paso a paso. Para eso tenemos zapatos de viajeros.