Desayuno con... pájaros

Hacía casi un año que no desayunaba con ellos. La última vez fue en agosto del año pasado, en vacaciones. Hoy me levanté temprano y salí a estirarme al porche como buena costumbre habitual y me llamaron. Ahora mismo, no hay más ruido que sus cánticos, sólo están los pájaros y el trote de un par de jinetes en sus caballos que pasaron muy cerca para deleite de los chichos. Total, que estoy en la gloria, querría grabar sus canciones pero el técnico de sonido está de baja temporal por sueño, lo que se está perdiendo mi in-law... igual lo consigo sola y me ahorro su desplazamiento y su hora de trabajo, já.

Es de los sonidos más sugerentes que conozco, despertarse con los canturreos de los pájaros o desayunar en su compañía es delicioso. Me chiflan los domingos por la mañana...